Evolución en la enseñanza
>> domingo, 12 de abril de 2009
El poder plasmar mediante un escrito determinados conocimientos, emociones; o el solo hecho de expresar sus ideales, hace mucho más interesante la tarea de conocer a las personas que se encuentran insertas en este mágico; pero al mismo tiempo difícil, reto de Educar.
Este ensayo se enfoca en la siguiente pregunta: ¿Por qué estudiar Pedagogía en el siglo XXI? Todos los que estamos estudiando pedagogía contamos con un mismo fin y objetivo, que es el poder “cambiar”, la calidad de la educación que se está entregando en los centros educativos.
Remontándome años atrás y tratando de hacer memoria, pensé en que siempre quise estudiar algo relacionado con niños, hasta que siendo más grande y ya teniendo una conciencia mucho más concreta, me di cuenta de que lo que realmente me motivó era: La Pedagogía, siendo ésta una palabra tan pequeña y corta deja entre ver lo difícil que puede llegar a ser el camino hacia ésta. Nunca pensé que el reto sería de tanta complejidad y de tanto esmero pero sin embargo decidí aceptar el desafío.
Hoy en día, hace mucha falta en los establecimientos que los Docentes sean más comprometidos y dedicados con la tarea del enseñar, generar aprendizajes y brindar herramientas a nuestros alumnos. Esto, lo puedo afirmar, gracias a las observaciones que he podido realizar en estos casi 3 años de carrera, Si bien mi idea no es poner en tela de juicio la labor de mis colegas, creo que sí es necesario, realizar un cambio rotundo en la manera de generar aprendizaje en las aulas de clases. Por todo lo anteriormente dicho, mi visión de docente es más que una vocación, es una pasión y una entrega total que quiero poder insertar en cualquier tipo de establecimiento educacional. Debemos tener en cuenta, el entorno que estamos insertos, nosotros como futuros docentes y también nuestros alumnos. La realidad en la cual nos encontramos debe forjarnos a ser cada día personas más competentes y autosuficientes, para que de ésta forma podamos tener como frutos de nuestro esfuerzo, alumnos más activos y reflexivos a la hora de demostrar sus habilidades y destrezas para un buen manejo dentro de la sociedad, que a veces puede llegar ser tan dulce y otras, suele ser de una magna crueldad.
Hoy, me encuentro cursando tercer año en la carrera de Educación general básica, pienso en los años atrás y puedo afirmar que el compromiso con la carrera no era tan fuerte y concreto. Hoy en día puedo decir, que me sitúo en una etapa decisiva en mi vida, en cual me juego todo por el todo, aunque muchas veces, me lleva la situación de la educación en mi país a poner a prueba mis ideales, mis emociones, y sobre todo mis temores, pero sien embargo; el compromiso que hoy tengo con la profesión que elegí, es más fuerte que nunca y mi meta es seguir luchando por mis ideales y contribuir al cambio de ésta.
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